En algún momento de nuestras vidas hemos tenido algo que hacer un sábado por la mañana. Algo que no nos da paz para seguir durmiendo y no darle importancia. Sabemos que es una obligación y también sabemos que no podemos faltar.
Sin embargo esa no es la peor parte. La peor parte es que tenemos una fiesta la noche anterior. Un día que vamos a llamarlo viernes.
Necesito tomar una decisión, ya que todos los viernes tengo fiestas. Pero esto no es simple, porque esta no es la decisión, es LA decisión.
Ok, keep calm. Tengo buenas noticias, paso a paso podrás solucionarlo y podrás tener una vida brillante como Yo.
1. Lo primero que tienes que hacer es categorizar el nivel de importancia de tu fiesta.
a. Súper importante, es una fiesta en donde es imposible que faltes, no hay excusas y no tiene perdón. Sobre todo son los cumpleaños u otro tipo de celebración de las personas que te importan. Si es que faltas hay consecuencias y podrías generar resentimientos y malos pensamientos hacia ti.
b. Importante, es una fiesta similar a la súper importante en donde vas para hacer acto de presencia y por algún motivo crees que es importante estar ahí, no interesa si la fiesta es divertida o no, simplemente tienes que estar ahí.
c. Divertida, es una fiesta en donde estás seguro que la pasaras increíble por muchos factores como la música, encuentros con amigos, tragos, etc.
d. Normal, es una fiesta en donde no opinas nada, simplemente llegaste por tu instinto fiestero.
e. ¿A nada?, es una fiesta que piensas ir cuando tu oferta de fiestas no es variada, quizá sea la única opción que tengas y no te llama la atención pero igual vas.
f. Un asco, es una fiesta en donde sabes que no te sentirás a gusto pero realmente estás desesperado por salir.
2. Reflexiona y analiza una vez más el nivel de importancia de tu fiesta.
Súper Importante: JAMÁS FALTES.
Importante: Puedes ir, pero sólo si piensas que es importante.
Divertida: No vayas.
Normal: No vayas.
¿A nada? : No vayas.
Un asco: Ni se te ocurra, si vas estarías enfermo.
3. El siguiente paso es plantear una solución, porque tu sabes que tienes algo que hacer al día siguiente, tienes que ser responsable por lo menos una vez en tu vida, y quieres una solución para poder hacer ambas cosas, ir a la fiesta y poder llegar a tiempo a lo que tengas que hacer al día siguiente.
4. Soluciones:
Súper Importante: Llegar, saludar, fotos, risas y estar un par de horas, no será lo mismo que estar toda la noche pero por lo menos es comprensible y perdonable, no será difícil que cierren las heridas.
Entiende que es una situación en la que tienes que estar en abstinencia. Recuerda que tienes cosas que hacer al día siguiente y no hay pretexto para tomar una gota de alcohol.
Importante: Si tienes que hacer acto de presencia por algo que te conviene, no dudes en ir. De igual manera llega justo en el momento en donde este presente lo que te conviene y no luzcas desesperado. Andate de la fiesta apenas terminaste lo que querías, si demoras en quedarte satisfecho con lo que querías no pienses en irte. Sacrifícate, tendrás que llegar con mucho sueño a lo que tengas que hacer al día siguiente.
5. Diviértete como siempre pero no dejes de pensar en las consecuencias que podrán pasar si es que te quedas toda la noche, sé responsable.
P.D: Luce siempre radiante, piensa cosas lindas y trata de ser mejor cada día.
Si puedes hacer esto, quizá algún día seas como yo.
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